Y aquí estás Isabo.
Eres tan yo que me gustaría sacarte de mis pensamientos, ahora sé que algo se rompió en ti años atrás, y de forma inevitable quedará su marca dentro de ti como una grieta en la pared.
Me pregunto si algún día podrás ser feliz, hace unos años te repetías: "no puedo, no sé como", esa idea estaba sembrada en ti como un cáncer pudriéndote, de esos que crecen de forma silenciosa, como esa mancha que se expande sin saber como parar, eres el miedo que te detiene antes de atreverte a dar un paso, el miedo a la soledad.
Qué pasará cuando lo logres? cuando no haya nadie; a quién le gritarás entonces?
Grita a la anda, no seas cobarde!
Y ahí sigues, intentando matarte poco a poco, terminando contigo desde dentro.
Destrozada.
Pues quédate en tu rincón muñeca.
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