Un día nublado, hoy tengo ganas de no estar aquí, de un abrazo, de pasar una tarde contando las nubes, no es necesario contar las palabras, los suspiros ni las oraciones. Damien Rice de fondo y yo sigo aquí. Y no estás. Siento cada nota en la piel, cierro mis ojos y me permito volar un poquito.  

2 comentarios:

Me gustan los días nublados, sobretodo aquellos que vienen acompañados de una llovizna que deja las calles con una capa brillante de agua. Me recuerdan los días en los que no tenía que preocuparme por el fin de mes. Me recuerdan los días en los que abría la ventana de mi habitación y el aire traía el aroma de la tierra. Me recuerdan los días cuando por la ventana miraba cómo los demás se divertían en la llovizna mientras que yo tenía que quedarme abrigado para evitar enfermarme. Me recuerdan los días en que tenía una libreta de apuntes donde dibujaba los planos de artefactos que me permitirían salir sin mojarme ni enfermarme.

Anónimo dijo... febrero 26, 2014  

Recuerdos olvidados, gracias!

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