Y el sol se hundía en su letargo
y la noche despertaba.
Y aquella noche que al duende
lo invoco un ángel gitano,
se hizo cielo el infierno
y al tocar por arrebato
lo efímero con lo eterno
entre palmas se rozaron.
Publicadas por
Anónimo
Y el sol se hundía en su letargo
y la noche despertaba.
Y aquella noche que al duende
lo invoco un ángel gitano,
se hizo cielo el infierno
y al tocar por arrebato
lo efímero con lo eterno
entre palmas se rozaron.
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